SOAP

Conducción autónoma: ¿Qué es y cuáles son los beneficios al manejar un vehículo?

Los vehículos que cuentan con conducción autónoma - se conducen solos - están dejando de ser algo que solamente era posible en las películas y pasaron a transformarse en una realidad. Esto gracias al avance tecnológico que ha experimentado la industria automotriz y que permite un rápido desarrollo de la conducción autónoma.

Este concepto implica a todas aquellas tecnologías que permiten manejar una parte o la totalidad de la conducción de un auto. De esta manera, puede ir desde herramientas de asistencia al conductor hasta un vehículo que es capaz de manejarse por sí mismo.

Existen seis niveles de conducción autónoma, los que se enumeran dependiendo del nivel de autonomía. Así, el nivel cero es aquel en el que el conductor hace todas las acciones y el cinco en donde el auto se maneja automáticamente.

Existen diversas marcas que han experimentado y lanzado al mercado los vehículos que se conducen solos. Aunque con los constantes avances y pruebas, no se descarta que próximamente nuevas compañías tengan estos modelos, considerando que en Estados Unidos este tipo de vehículos ya se encuentran a la venta y su uso está permitido en algunos estados.

Te recordamos que para conducir cualquier vehículo necesitas contar con tu licencia de conducir, además de toda la documentación, como la revisión técnica al día, permiso de circulación y el Seguro Obligatorio de Accidentes Personales, conocido como SOAP, vigente.

¿Qué se entiende por conducción autónoma?

La conducción autónoma es el conjunto de herramientas tecnológicas presentes en un vehículo que le permiten enviar alertas de seguridad al conductor. A su vez, existen otros modelos que se manejan sin la intervención de las personas.

Para que un vehículo cuente con esta tecnología se le deben integrar una serie de sensores, cámaras, radares, entre otros sistemas. Estos son los que le permiten interpretar lo que sucede alrededor y enviar avisos o tomar decisiones de manera independiente.

Esta tecnología se clasifica en seis niveles que van desde el cero que corresponde al vehículo sin automatización hasta el cinco que es aquellos que poseen una automatización total.

Algunos ejemplos de herramientas que existen en la conducción autónoma son el control crucero y el asistente de mantenimiento de pista. A estos se le suman el estacionamiento automatizado, detector de puntos ciegos, frenado automático de emergencia, entre otros.

Es por este tipo de funcionalidades que los vehículos autónomos prometen un gran nivel de seguridad. Con estas tecnologías, las marcas de automóviles buscan reducir la cantidad de accidentes que son causados por culpa de los conductores.

¿Cuáles son los niveles de conducción autónoma?

Existen seis niveles de conducción autónoma que van desde el cero hasta el cinco. Estos fueron creados con el fin de poder medir el grado independencia del conductor que tiene un vehículo.

Revisa a continuación los niveles de automatización que existen en los vehículos:

  • Nivel cero (0): En este nivel, el auto no tiene ningún componente de independencia. Por lo tanto, es el conductor quien se encarga de llevar a cabo el 100% de la conducción. Sin embargo, pueden contener algunas herramientas básicas como los sensores de retroceso, que dan aviso de la proximidad de objetos o personas en la parte trasera.
  • Nivel uno (1): Aquí el automóvil puede controlar algunas cosas como el nivel de aceleración y la dirección, por lo que la conducción de este vehículo se realiza “en conjunto”. Un ejemplo de este nivel son los controles de velocidad crucero y la asistencia para el mantenimiento de la pista.
  • Nivel dos (2): En este caso, el rol del conductor continúa siendo fundamental en la conducción del auto, ya que debe mantenerse atento a las condiciones del tránsito, aunque tiene la particularidad de que el vehículo le entrega ayuda para el frenado, lo que otorga mayores niveles de seguridad. Además, algunos vehículos son capaces de estacionarse de forma autónoma.
  • Nivel tres (3): En este punto el vehículo puede manejarse por sí solo, aunque le avisará al conductor en caso de requerir que tome el control. Gracias a los sensores, el automóvil puede mantener la pista y detectar objetos para evitar accidentes.
  • Nivel cuatro (4): Significa que un auto puede realizar todas las tareas de conducción y no es necesaria la constante atención del conductor. Este sistema es capaz de “escanear” a su alrededor para tomar decisiones en caso de alguna emergencia.
  • Nivel cinco (5): Este corresponde al último nivel y es cuando no se requiere un conductor, por lo que pueden existir vehículos que no cuenten con volante ni pedales.

¿Qué ventajas tienen los vehículos autónomos?

Dentro de las ventajas que tienen este tipo de autos, se encuentra que brindan una mayor seguridad, ya que la gran cantidad de sensores y alertas que tienen pueden contribuir a disminuir la cantidad de accidentes que se producen.

A su vez, los vehículos que poseen herramientas para el manejo independiente tienen un mayor ahorro de energía. Lo que se da gracias a que administran de mejor manera el consumo de combustible, con lo que a la vez están ayudando al planeta, más aún si consideramos que muchos de ellos son vehículos eléctricos.

Por último, encontramos la mayor comodidad que entrega a todos los ocupantes el tener un vehículo que en ciertas condiciones pueda manejarse de manera autónoma. Con lo que se puede evitar la fatiga del conductor, especialmente en aquellos viajes que son demasiado largos.

Al igual que todos los vehículos, este tipo de automóviles necesitan contar con el SOAP al circular por las calles y carreteras en Chile. Esta póliza, de carácter obligatorio, ofrece cobertura en caso de lesiones y muertes en caso de un accidente según lo que establece la ley.